¿Cómo promuevo la transformación digital dentro de mi empresa? La respuesta parece evidente: implementando una estrategia digital integrada basada en la personalización y en acciones multicanal, hecha a medida según los deseos, comportamientos y necesidades del público objetivo.

Pero, ¿cuál es la clave para conseguir inmediatez en el plan de acciones y engagement en la relación con los usuarios? Obtener un pleno entendimiento de nuestros clientes, aprovechando las oportunidades que ofrece la analítica digital de negocio suele ser la fórmula perfecta. Aunque ésta es sólo una parte de la ecuación. Las compañías capaces de llevar a cabo con éxito y continuidad campañas de real-time marketing son aquéllas que disponen de estructuras organizativas flexibles, en términos de personas y procesos, así como de tecnología avanzada y personalizable que potencie los esfuerzos de inmediatez.

El marketing en tiempo real supone un cambio de mentalidad dado que tradicionalmente las empresas emitían mensajes unidireccionales para comunicar los beneficios de sus productos/servicios. Hoy en día, el paradigma de comunicación ha cambiado, se busca el vínculo con las personas. Para llegar a establecer una relación afectiva con sus públicos, las empresas necesitan poner en el centro de su organización a las personas que están detrás de sus stakeholders. De esta forma, las estrategias de comunicación son más personalizadas, relevantes, comprometidas y de utilidad para el consumidor, proporcionándole una experiencia de usuario mucho mejor y más satisfactoria que en el pasado.

Los profesionales de marketing tienen que centrarse en las siguiente áreas para conseguir el éxito en sus estrategias de marketing digital:

1. Inteligencia de negocios en tiempo real

Encontrar el Santo grial formado por el big data y la analítica avanzada (Wi-fi analytics), puede llegar a ser una realidad si se involucran a los perfiles adecuados, se implementan unos procesos que doten de agilidad a la organizaciones y se pongan en marcha plataformas ad-hoc, basadas en los objetivos del análisis. Por ejemplo, la analítica digital de negocio puede llegar a definir cuáles son los productos de una compañía que tienen una demanda creciente, que, a su vez, puede ser una fuente de insights de valor con respecto al tipo de producto, color o tamaño que mayor popularidad consigue entre los consumidores. Estos datos son los fundamentos para la toma de decisiones estratégicas y de negocio con respecto a la oferta comercial, ajustes en la presentación de contenidos comerciales en los canales digitales de la empresa o incluso sobre cambios en el comportamiento de compra de los usuarios. A medida que la empresa adquiere la capacidad de aprender de estos datos, el llamado business intelligence, también consigue ajustar su oferta para que responda al máximo a las necesidades de sus clientes, actuales y potenciales.

2. Analítica en tiempo real centrada en el usuario

Para convertir la inteligencia de negocio obtenida a través del estudio del comportamiento de los usuarios en acciones de marketing hechas a medida, la empresa, y más concretamente el equipo encargado, tiene que ser capaz de aplicar la analítica digital a un nivel más personalizado. Aquí se incluye la habilidad de identificar disparadores que predicen el comportamiento de los usuarios, las oportunidades o riesgos sobre las cuales el equipo de marketing debería actuar. Por ejemplo, la analítica podría determinar futuros intereses por un producto/servicio para cada consumidor, no identificados hasta la fecha, basándose en el histórico o en los datos en tiempo real. La analítica de datos puede identificar también el riesgo de abandono por parte de un usuario de tal manera que las campañas de fidelización que se le enviarán estarán personalizadas en base a aquello que más le interese. Aquí es donde entra en juego el marketing automatizado.

3. Marketing personalizado a través de canales digitales

Desde la perspectiva customer-centric, la analítica en tiempo real tiene que ser transformada en un plan de acciones personalizadas (por segmentos o clusters), es decir, el mensaje correcto, en el momento correcto a la persona correcta. Para conseguir esta fórmula perfecta, es necesario disponer de 3 elementos fundamentales: tecnología, personas y procesos. La buena noticia es que los canales digitales permiten que el real-time targeting sea más factible que nunca. La personalización “masificada” del contenido a través de canales digitales es mucho más eficaz en términos de costes que si tuviera que hacerse lo mismo en canales tradicionales.

En este sentido, uno de los canales más explotados para entrar en contacto con los usuarios a través de contenidos y acciones que generen egagement, es el omnipresente smartphone. Es un dispositivo que se ha convertido casi en una extensión del cuerpo humano con lo cual supone una oportunidad para las compañías de estar conectadas con los consumidores las 24 horas del día.